El origen del helado es incierto: hay teorías que hablan de primeros indicios del postre en China, hace 3.000 años; otros ubican su descubrimiento en Persia, 1.500 años más tarde; y hay quienes directamente hablan de Marco Polo, aparente responsable de la llegada del helado a Europa.
Como sea, el helado es bienamado por todos, y en Argentina, con su rica tradición de inmigración italiana, alcanzó un nivel de alto reconocimiento internacional. A continuación, un repaso por algunas de las mejores opciones para celebrar la fecha con un cono, un pote o un vaso.
Obrador Florida – Soler 5063, CABA
Como primera parada, se recomienda pasar por el proyecto de Mercedes Román que se destaca por su mirada de los postres helados con la filosofía y el trabajo de un restaurante, con especial atención en los productos de estación y los procesos artesanales.
Si bien la carta entera es una invitación a festejar el helado, una buena opción es probar la colección de sándwiches, con cuatro variedades: de helado de vainilla y ciruelas; de helado de dulce de leche y maní, ambos con tapas de chocolate 56% de República del Cacao; de helado de pistachos de San Juan y limón Obrador; y de helado de coco y maracuyá, ambos con tapas de masa de avellanas. Los sándwiches se encuentran disponibles en el local y también pueden encargarse para eventos.
Gordo Chanta – Juan Ramírez de Velasco 1200, CABA
Especialmente conocido por sus pizzas, aunque el menú incluye varias otras opciones que vale la pena probar, como buenas picadas, aguachile, elotes y panzanella, entre otras. También son entusiastas del helado, y recomiendan sobre todo el soft de crema chantillí con el que acompañan su espectacular baklava. Por otra parte, ofrecen un gran Don Pedro, reversión del clásico porteño preparado con una medida de whisky escocés, helado de crema y maní garrapiñado.
Bordó – Conesa 1483, CABA
Facundo Kelemen tomó la decisión de desarrollar un menú en el que cada plato estuviera basado en un único producto, estableciendo un paralelismo con la uva como protagonista absoluta de cada botella de vino. El helado se hace presente en platos salados y dulces, dependiendo de la temporada, y en este momento se destaca en los postres de durazno y de chocolate; este último incorpora semifreddos de chocolate blanco y con leche.
Baja América – O’Higgins 3424, CABA
El proyecto de los amigos mexicanos Antonio Bautista y Freddy Morales, quienes desarrollaron un menú inspirado en los sabores latinoamericanos y acompañado por grandes etiquetas de vino. Uno de los postres más distintivos del restaurante es el helado de palta y crema inglesa, que se sirve con tierra de cacao, picado de manzana y curp de lima-limón. Ideal para cerrar la noche con una taza de café de Colombia filtrado en chemex.
Mess Cocina – Los Crisantemos 392, Del Viso
Saliendo de la capital, Mess Cocina propone, por un lado, su postre de helado de baklava, y por otro, el postre lokmà, que consiste en buñuelos fritos embebidos en almíbar y acompañados por un cremoso de chocolate blanco tostado y helado de caramelo.