Wanda Nara se encuentra en el centro de un torbellino mediático, nuevamente envuelta en un escándalo que mezcla conflictos familiares, tensiones legales y episodios sentimentales. El fin de semana, marcado por el cumpleaños número 10 de su hija Francesca, expuso las complejidades de una trama que parece no dar tregua y que involucra a Mauro Icardi, a sus hijos y a Eugenia China Suárez, en un enfrentamiento que trasciende lo privado para convertirse en un espectáculo público.
Tras el festejo doble del cumpleaños de su hija mayor con el futbolista, del que participaron familiares y amigos cercanos, pero no el padre de la niña, Wanda publicó un emoji de corazón roto en sus historias de Instagram. Se trató de un gesto que, aunque pequeño, resonó con fuerza entre sus seguidores, quienes no tardaron en relacionarlo con los problemas familiares y el conflicto legal que enfrenta con su expareja. Más tarde, sorprendió al compartir una foto de su pasaporte junto a tres más, acompañado de un mensaje que destacaba la rapidez y eficiencia del sistema argentino para tramitar documentos: “Nada que envidiar a Europa. Rapidísimo y en mi casa me entregaron los pasaportes de mi familia. Orgullosa de ser argentina”. Aunque su publicación parecía elogiar los servicios locales, fue rápidamente interpretada como una indirecta hacia Icardi, quien desea llevar a sus hijas a vivir a Turquía y resolver la disputa en los tribunales de ese país.
El cumpleaños de Francesca agregó otra capa de conflicto. Según reveló Yanina Latorre, el futbolista intentó comunicarse con su hija para saludarla, pero la situación desembocó en un cruce con Wanda. “A las 12 de la noche Mauro llamó a Fran diciendo ‘estoy acá con Rufi que te quiere saludar’, pero la nena no quiso, se puso a llorar y Wanda se enfureció”, relató la panelista. Este episodio, que incluía la participación de la hija mayor de la China Suárez, generó tensiones inmediatas. Latorre también afirmó que la actriz envió un mensaje lleno de insultos a Wanda, donde le dijo: “Te voy a arruinar la vida, mitómana de mier…”.
Mientras tanto, el entorno de Wanda buscó celebrar el cumpleaños de Francesca en un ambiente familiar, lejos de los conflictos. La empresaria compartió emotivas palabras para su hija: “Hace algunas noches que volvimos a dormir así como cuando era bebé. Ella dice que soy su lugar seguro, y lo que no sabe es que ella es el mío”. Acompañada de sus hermanos mayores, Valentino, Benedicto y Constantino, quienes regresaron recientemente de sus vacaciones con Maxi López, y de su hermana menor Isabella, Francesca comenzó su día con un cálido desayuno que incluyó una bandeja repleta de dulces. Al festejo, ambientado en el interior de su casa por el mal clima, también estuvo presente su abuela, Nora Colosimo, quien parece ser un pilar fundamental para Wanda en este difícil momento.
En paralelo, la relación entre Mauro Icardi y la China Suárez sigue generando comentarios, especialmente por cómo este vínculo podría estar influyendo en las dinámicas familiares. Según Latorre, el futbolista habría afirmado que asistiría al cumpleaños de Francesca, pero acompañado por su pareja, lo que generó incomodidad en su hija y rechazo por parte de Wanda.
Este viernes será clave para definir parte de la disputa legal, ya que está programada una audiencia por Zoom para abordar la custodia de las niñas. Wanda, según se informó, no cumplió con la entrega de las hijas a Icardi y no parece dispuesta a ceder en su postura. Este hecho podría complicar aún más el panorama, aumentando la exposición pública de un conflicto que parece no tener fin.
La situación de Wanda, lejos de resolverse, continúa escalando con cada nuevo episodio, alimentando las especulaciones y la atención de un público que sigue de cerca cada movimiento en este drama que mezcla el ámbito personal con el mediático.