El primer ministro socialista británico, Keir Starmer, defendió este lunes a la secretaria de Estado británica, Jess Phillips, ante quienes, según él, «propagan mentiras y desinformación«, en relación con los recientes comentarios del fundador de Tesla y propietario de la red social X, Elon Musk, dirigidos contra la funcionaria.
En un discurso pronunciado hoy en el condado inglés de Surrey ante trabajadores del sector sanitario para explicar los cambios propuestos en el sistema de salud pública, el líder izquierdista del Gobierno británico fue cuestionado sobre los últimos tuits de Musk en X.
En esos mensajes, el exitoso empresario, entre otras cosas, sugiere que Phillips debería ser «encarcelada» por su postura frente a las numerosas bandas de inmigrantes ilegales musulmanes que violan y abusan sexualmente de menores en todo el país.
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En estos mensajes, el magnate sudafricano también tacha a la secretaria de Estado para la protección y prevención de la violencia contra mujeres y niñas de ser una «apologista del genocidio por violación«, además de llamarla «bruja malvada«, acusaciones que el ministro británico de Sanidad, Wes Streeting, calificó el día de ayer como «difamaciones vergonzosas«.
El origen de estos ataques fue el rechazo de Phillips a una solicitud de las víctimas de violación para que el Gobierno británico liderara una investigación pública sobre casos de explotación infantil detectados en la localidad inglesa de Oldham.
Un defensor de los violadores
Al referirse a la controversia, Starmer, en vez de combatir a los violadores musulmanes, se dedicó a atacar a la derecha, acusándola de «mentirosa«, negando la enorme cantidad de casos de violación y comentando que «aquellos que propagan mentiras no están interesados en las víctimas«.
El líder del Partido Laborista expresó que «a la mayoría de la gente le interesa más lo que ocurre en el NHS -sistema sanitario público- que lo que pasa en Twitter (por X)«.
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«Aquellos que están atacando a Jess Phillips, a quien estoy orgulloso de llamar colega y amiga, no están protegiendo a las víctimas. Jess Phillips ha hecho mil veces más que lo que estos podrían soñar cuando se trata de proteger víctimas de abusos sexuales«, subrayó el socialista.
El primer ministro también afirmó que quienes quieren una investigación completa sobre las bandas de violadores de Gran Bretaña se están «subiendo al carro de la extrema derecha«.
Starmer añadió que estos ataques contra su compañera buscan «promover la intimidación y las amenazas de violencia, confiando en que los medios de comunicación lo amplifiquen«.
De esta manera, el primer ministro británico se puso del lado de los violadores musulmanes, faltándole el respeto a todo un país que quiere justica ante la inacción de su gobierno.